viernes, 11 de febrero de 2011

A lo largo de la carrera de Relaciones Internacionales, los estudiantes de la misma nos hemos percatado de su acentuada interdisciplinariedad.  En alguna ocasión he puesto en duda si esa característica no nos pone en desventaja frente a estudiantes de otras carreras de las ciencias sociales tales como Derecho, Economía, Ciencias Políticas, etc., las cuales acotan el campo de estudio que analizan y necesitan en menor grado de la intervención de otras disciplinas.
Por el contrario, en el plan de estudios de nuestra carrera puedo observar claramente que está conformado por asignaturas, entre ellas,  de otras disciplinas sociales, lo cual provoca que el internacionalista en tanto científico social, considere desde distintos puntos de vista la concepción de un problema de sociedad pues los límites de la intersección entre diferentes áreas de conocimiento no existen para él. Es por ello que dicha interdisciplinariedad es más bien una característica positiva si no olvidamos que el objetivo del científico social es estudiar los problemas fundamentales del hombre y darles alternativas. Para ello, necesita verse a la realidad estudiada como un todo en el que factores de diferentes categorías están presentes, y es allí cuando la interdisciplinariedad desempeña su papel más importante.

No hay comentarios:

Publicar un comentario